Segundo domingo de Adviento
Del mismo modo que el profeta Isaías anhela la llegada de un tiempo de paz y San Juan Bautista nos invita a preparar el camino del Señor, nosotros encendemos estas dos velas, reavivando la esperanza del cumplimiento de las promesas hechas a los patriarcas de Israel.
Que estas luces nos impulsen a disponernos con nuestra vida para llegada del Señor.
